Hago lo que sea por trasladar a mi memoria la necesidad de saber que ha comenzado 2012 y que algunos hábitos deben dejar de serlo y hay que emprender otros nuevos. Las primeras horas del año las manejo construyendo ese listado de voluntades que deben de dejar de serlo para dejar espacios abiertos a un año mejor. El 2011 tengo la sensación de que me ofusqué en hacerlo parecer peor de lo que realmente fue. Quizá, tan sólo, no estaba preparado para tener un año anodino, o tan anodino como me pareció éste. Al final se acabó, y con salud que dice todo el mundo. Y eso ya debería de sernos suficiente.
Quiero escribirme mis propósitos para el año próximo y hacerlo claramente, para que no queden puertas abiertas a la improvisación. A veces, cuando escribo en el blog, cuando recuerdo que está abierto al mundo, encripto sentimientos, sensaciones, nombres, situaciones,... para evitar quién sabe qué. Me gustaría por eso, ahora que estamos empezando, construir esa lista de quereres, de voluntades y propuestas para el 2012 con una nitidez absoluta y decidir lo que haya que decidir.
MIS PROPÓSITOS PARA 2012
1.
Quiero querer. Quiero decidir y moverme. El 2012 ha de ser por encima de cualquier otras cosas el año del movimiento. Tengo la percepción que la segunda mitad del año pasado la dediqué a quedarme quieto, a buscar el descanso que antes no tenía, la inacción poco habitual en mí, a no moverme en exceso y a dejarme las horas colgadas ante el ordenador sin hacer nada más que no fuera esperar a que llegara cada noche, para hacer exactamente lo mismo. Por eso ha llegado el momento de decidir qué quiero e ir a por ello, de trabajar para conseguirlo, de batallar para alcanzar las metas... Y tengo que insuflar acción y reacción, porque quieto no debo estarme ni un día más.
2. En esta línea, quiero retomar el
salir a correr, volver a nadar e incluso me había planteado comenzar el año yendo al gimnasio. Pero tengo la sensación que, al final, en esto como en la autoescuela acabaría patinando. Lo de salir a correr es más fácil, aunque el frío invita a casi nada, pero me apetece volver a correr...
3. En la vida sana tengo que regresar a las
dietas cuidadas. 2011 tuve dos momentos claves marcados por la comida controlada y sana: después de marzo, al caer enfermo, y en septiembre con el proceso de los dientes. Tengo que volver al dentista, además.
4. Volver a la lectura, a la escritura (¿habrá llegado el momento de empezar?) y al ocio más hogareño.
5. Tengo que reorganizarme la economía familiar, aunque es bien cierto que estoy mucho más controlador que nunca.
6. Debo de dejar atrás
los problemas que ya no son de hoy. Tengo un problema básico en mi vida y es mi capacidad de arrastrar los problemas, de tenerlos presentes y batallarme a menudo para conseguir que se solucionen y si no lo hacen se conviertan en algo que mantengo siempre vivo. Ha llegado el momento de abrir nuevas puertas. Las que se cerraron habrá que dejarlas cerradas y emprender nuevos caminos. El tiempo acaba por poner todo en su sitio y yo no debo empeñarme en cambiarlo, porque igual mi sitio es otro... Si la puerta se cerró, habrá que abrir otras puertas en el futuro...
7. Quiero decir quiero y no tengo. Las oportunidades de querer cosas hay que tenerlas, apreciarlas y disfrutarlas. A menudo me he empestillado en tener que hacer cosas dejando incluso de lado aquellas que quiero o me apetece hacer. No puede ser una obligación, tiene que ser una voluntad.
8. Recuperar la ilusión me parece importantísimo. Tengo que proponerme las posibilidades de alcanzar el reto más excepcional...
9. Vivir intensamente un año más.
10. Que mis amigos disfruten de la alegría y de la ilusión: que tiene que ser contagiada... Esos retos pasarán por todas las facetas de mi vida, desde el trabajo a las nuevas experiencias. Hay que saber dónde se está y dónde se quiere llegar y conseguirlo, sin hacerle mal a nadie, pero intentarlo... Yo he perdido demasiadas horas entre la autocomplacencia y la sobriedad cuando hay que apostar por uno.
Son algunas ideas, algunas voluntades, algunos propósitos como decíamos... Algunas líneas que dejo aquí escritas para revisarlas de vez en cuando.
Querido Jaume: ha llegado el momento... Ya es 2 de enero, la excusa esperada para empezar...