martes, 8 de mayo de 2012
FELPUDOS
De mis cosas de ayer creo que cumplí comer en casa de Rosa. Escribo en la noche que va del lunes al martes, recién llegado de la sede, de la cena de final de mes, con la sensación de ser un pequeño trozo de barro que se va moldeando... ¿Habéis tenido alguna vez esa sensación? ¿Habéis sentido alguna vez la humedad de la arcilla y sentir como si una paleta fuera aplastando pequeños matices que te dan forma? Quizá la metáfora es demasiado grande, pero de verdad, que me siento así. Empiezo a comprobar como los matices que otros me enseñan, me ayudan a mejorar. Reposo más, aunque mis nervios se cojan al estómago. Camino más, porque el cansancio se quedó en casa y sueño sin tener sueño, y prefiero no pensar y seguir caminando... Siempre he sido de pensar, de soñar mucho... ¡Es gratis! Y aunque me pateo los rincones sumando cifras de matrículas y dejando en un 13 mi futuro y mis alegrías, intento no despegar los pies del suelo, que es donde hay que tenerlos siempre...
Me llamaron por la mañana. Me fui al despacho del grupo y me puse a llamar por teléfono y a organizar un acto para la misma tarde. Salí y comí sopa de pescado que preparó mi hermana. Tengo que reconocerle que le salió estupenda. Me voy corriendo a casa porque tenía que ultimar alguna cosa y salgo a tomar café y a la sede. De aquí a una inauguración de una exposición de fotos, hago camino a la comisión de cultura, paso por el acto que tenía en el casino, recogemos las sillas, voy a la reunión de fin de mes y compro una ensalada a medias con Pepa en el Tanguito para cenar en la sede... No hay tiempo para dejar los pies quietos, vaya. No hay alfombras ni felpudos que se acostumbren a mis pies y tengo la casa por recoger y la memoria por reordenar... Muchas cosas en la cabeza y una sensación de que la vida marcha, sin saber hacia adónde, como mis pasos tranquilos pegados al camino... Sin tiempo para parar, sin tiempo para mirar atrás... Buscando un hueco hoy que me ayude a decidir por mañana...
La báscula tiene que empezar a caer... [90.6 ya no es una emisora de radio...]
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2 comentarios:
Sueñas , sueñas y vuelves a soñar. Aunque digas (y puedas llegar a pensar) que no sabes hacia adónde vas, los sueños son los que te marcan el camino y el lugar de destino. ¡Aprovecha!, que como tú muy bien has dicho. soñar es gratis.
Permíteme que cite a Calderón de la Barca:
Yo sueño que estoy aquí,
destas prisiones cargado;
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.
bueno,pues me alegro que te gustara la sopa, cuando quieras repetimos, un besete.R.
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