jueves, 30 de octubre de 2014

WONDERWALL

Me he despertado más creativo de lo normal. Más madrugador en este blog de lo que acostumbro. Me tendré que duchar rápido y saltar al curro. Pero en el empeño por salir, me he puesto música - que amansa las fieras - y entonces he pensado en algo que habré hecho alguna vez más pero de manera más inconsciente: ¿por qué no escribir al ritmo de una canción? No he elegido ésta por nada en especial, pero voy a intentar ver qué pasa cuando no se decide qué se escribe... Pongo la canción y...


Podría salir a la calle, ponerme a rapear, andar a paso rápido con mi MP3 sonando y la guitarra rasparía igual. Me encantaría notar el frío colarse en mis labios cuando intento copiar la voz del cantante y canto haciendo muecas sin que vuele la voz. El cielo está gris. Los coches pasan. La señora mayor con su carrito, el chico que pasea el perro y me mira tras sus gafas, el señor que anda con las manos atrás... Ese coche giró por la esquina, es rojo. E imagino cómo repito mi camino de todos los días. Pero hoy salto, voy dando saltos, siento la alegría romper en mi pecho, el corazón entrecortarse como cuando corres y hace frío...

Hace tiempo caminaba así. Hace tiempo tenía una sonrisa siempre para compartir con toda la gente que tenía alrededor. Pero quizá mi paseo no habla de hoy. Creo que mis pasos son de mañana. Serán. Y me siento feliz, casi trotando. Por la avenida los coches circulan a mayor velocidad. Observo cómo me miran desde las mesas del café. Cómo apretan sus café con leche mientras los abrigos empiezan a acurrucarle. Me pareció reconocer a aquella chica que mira de manera especial. Y sigo. Saltando, andando, volando... El cielo se fuma entre nubes negras. Una señora salió al balcón. Por la calle, los niños, de la mano, cogen a sus madres y caminan preguntándoles mil cosas... Ellas casi lloran. Caminamos todos a distintos pasos. Giro la esquina, casi choqué con el señor del periódico: su cara de enfado, no es la mía... Y al final, una luz.

Bueno... Una experiencia más... (feliz jueves).

miércoles, 29 de octubre de 2014

EL LOBO


En el cine, en la tele, en los guiones en general lo llaman "tensión sexual no resuelta". Lo que a mí aquí hoy, ahora, me compete no tiene nada sexual. Lo llamaremos pues: tensión no resuelta. Y añadiría yo, de difícil resolución. Cuando me he empeñado en escribir, cuando me he decidido a contar aquí que hay sitios o personas que da la sensación de que a uno no lo quieren y que haga lo que haga nunca tendrá solución, he pensado que lo mejor era ilustrar la hoja perdida con la fotografía de un lobo. No sé si por aquello del animal herido, porque me parecen tan bellos como feroces, porque lo imagino igual en manada que solitario, porque tienen una vida distinta, o porque su agilidad y ferocidad les mueve a un ritmo distinto. O a lo mejor, y más trivial, porque anoche vi "Drácula" celebrando el día del cine con Kike y Edu y como un murciélago no me representaría a los niveles de glam que uno requiere, pues he caído en este animal al que nunca le presté atención.

Yo siempre he sido de leones, caballos y toros. Ni perros, ni gatos, ni periquitos, ni morsas... Si acaso un tigre. De Bengala. Bengalí. Pero lo del lobo tiene más pinta de solucionarlo Freud que de explicarlo yo. Demonio o guerrero, qué más da. Como me gusta a mí resumirlo: tengo el cuerpo jotero. Las cosas como son, porque a base de tontos que dejaron sueltos por el mundo, mi camino serpea más que el de Machado al caer la tarde...

Hoy es 29 de octubre. Solo por la fecha no tendría que llevar ningún tonto a las espaldas, pero me cuelgan. Eso es así, querida amiga. Algunos dicen que dije. Mienten. Otros marcan sus distancias con bromas que ni ellos entienden porque las mascullan rápido ya que nada les importa el que tienen enfrente, ni que las entienda ni que no... Y yo, que ultimo ya el programa de hoy en la tele, inaugurando sección de toros, me preparo para dar una nueva vuelta al ruedo.

Me acosté y me desperté riéndome con Aurora a vueltas del grupo de whatsapp de nuestros quintos. Me tomé un café con leche y con Paco y Mariana en la plaza. Acudí a la rueda de prensa de una señora que con sus 82 años miraba al deshaucio a la cara. Y subí al despacho. Bajé a los infiernos. Y me fui a comer a casa, con mis padres. Intenté hacer una siesta que pasé en duermevela como quien camina sobre el filo de un cuchillo y escuché algo de música, ducha y ropa. Taxi y a la tele... Y ahora, que tengo que rematar todo, solo pienso en por qué elegí el lobo... ¿Demonio o guerrero? Me encantaría un poco de todo... pero soy más sencillo. ¡Hasta más sencillo de lo que parezco!

martes, 28 de octubre de 2014

MIL RAZONES PARA QUEDARME ATADO A ESTA SILLA

Como un enfermo herido de muerte que se va apagando en su enfermedad, casi en silencio, apartado, sin dolor siquiera, más allá del del mismo adiós, este invierno lejano va entrando con un otoño calmado, apático, anormal... Cada mañana, es cierto, hace un poco más de frío, pero tan tímido que acabo por perderme y no saber qué ropa ponerme. Qué tocará cada día. Y añadiendo, al hecho consumado de no tener que tapar, que uno se hastía de ver lo que tiene y alcanza la mayor desilusión encaprichado de que no tiene nada que le guste. Y entonces, casi, me sacudo, porque me lo merezco, pero enseguida me deshago de la idea y me voy a otras cosas menos triviales.


La corrupción hace que todo huela a mierda. Ayer fue un día informativamente completo. De aquellos que sacuden las consciencias de quienes aún tienen conciencia. Eso es así. No creo que haya otro resumen con el que poder cerrar un lunes aciago de otoño, que no sabe a otoño.

En mi pelea con la báscula le arañé dolor hasta los 89.200, que es algo así como pegarle un bocado a la grasa en su autoestima. Aún queda mucho, pero el primer paso, siempre tan complejo y tan duro está dado. También dí los primeros pasos en salir de nuevo a correr. Casi no me dejé la opción ni de plantearlo, porque si lo hubiera pensado, habría encontrado mil sitios a los que volar o mil razones por las que quedarme atado a esta silla, giratoria, y de condena que me tiene siempre frente al ordenador.



Por la noche, después de la ducha y de dejar las zapatillas colgadas, tuve reunión de final de mes en el partido. Me levanté al baño y seguí durmiendo, porque eran las 4:40. Me desperté con la sensación de que el 28 de octubre es importante por algo: aún no sé por qué. Y me acosté de nuevo hasta que me levanté y volvimos al tajo. Tomé café con leche en el Menjant, leí la prensa y seguí la marcha. Comí dos calamares asados y un trozo de salmón pasado por la plancha.

Voy a seguir con la marcha. Esta noche: cine. Drácula. Lo mejor para olvidarse de ciertas tontas que sobrevuelan la geografía gitana de esta piel de toro. Ay señor, con la de tontos que se topa uno en la vida...

lunes, 27 de octubre de 2014

MI MELANCOLÍA DE NUBES BLANCAS Y CIELOS GRISES


Hago un alto en la mañana. Me sabe mal hacerlo, existe cierto complejo de estar perdiendo el tiempo o de que alguien piensa que no estamos a lo que toca. Papá se empeñó la vida entera en demostrarnos que hay que ser trabajadores. Y creo que lo llevamos inconscientemente a fuego. No hay horas para el trabajo, las obligaciones,... Por eso ando sin caos por una vida tan cargada de cosas. La frase mñas repetida, aquella de "no sé cómo te da tiempo a todo" se convierte en una letanía que solo se entiende si se tiene grabado a fuego, como dije, que hay que sacar la faena adelante... Aunque ésta mía, a días, sea tan difícil hasta de explicar...

Tengo el estómago de noviembre. Me gustaría estar en pijama con una taza de caldo, acurrucado bajo una manta a cuadros, junto a un ventanuco viendo caer el agua. El cielo hoy ha intentado estar nublado un rato. Casi más por obligación que por devoción en este inaudito verano alargado que nos mantiene con temperaturas estivales sin que nadie sepamos cómo ni por qué. Decía que las tripas me piden lluvia y soledad, apartarme del camino y sentarme a contemplar un pájaro volando a lo lejos y que se difumina bajo los intensos nubarrones blancos que anuncian tormenta. Para caer en mi sueño, escucho por spotify voces que nunca había escuchado y que os recomiendo: Roseave, Family of the year, Eddie Vedder, Chrissie Hynde,... Si las escuchas, entenderás la melancolía que se cuela en mis ganas de lluvia, en mi querer que se pare el mundo, cobijar mis manos frías bajo una manta y el tejado debajo de un manto increíblemente esponjoso de nubes blancas y cielos grises... Así ando, por la vida, en este lunes en el que no se puede pedir nada. En el que habrá que seguir caminando sin pensar que ayer fue domingo y que mañana ya será martes... 

La música sigue. Y mi melancolía de nubes blancas y nubes grises baila agarrada a la necesidad de seguir caminando... Sigamos. Pues.

domingo, 26 de octubre de 2014

DECIDIDO

Decidido: mañana me pongo a régimen severo. Hoy, por lo menos, me acabo de cenar unas patatas fritas con huevo frito, unos nachos con salsa picante y chocolate de postre. Pero mañana me pongo a dieta. Decidido.

Ha llegado el momento de tomar decisiones. Una, por ejemplo, que me decido a seguir sonriendo. Me encanta nuestra foto del viernes noche, sonrisa de oreja a oreja, de Laura, Alberto, Kike y Manu. Cenamos en casa de Kike y Edu, Manolín y yo. Luego Cyraneamos lo que pudimos, porque casi no podíamos ni entrar. Y nos fuimos ya de noche a Reino de Valencia y nos quedamos en un banco de la avenida. Manu se había ido a la A3. Nosotros nos quedamos a la sombra de las palmeras, sin pensar que alguna de éstas pudiera caernos. Hasta las cinco y algo de la madrugada, podemos decir, no calló ninguna. Afortunadamente. 

Decidido también. No volveré a decir que cojo vacaciones en la primera semana de agosto porque así me evito la calor. Lo de este año es de pandereta. 26,4 grados a las 22:09 de un 26 de Octubre. Casi nada. A este paso, mi operación bikini es para ir en bañador a la cena de nochebuena.

Me desperté el sábado porque sonó el despertador. Almorcé con Tiby, Lola, Laura y Alejandro en el antiguo Bar Moreno (no me he fijado si ha cambiado de nombre, la verdad). Dormí casi nada y me preparé para la sesión de fotos en la Albúfera. El sábado tarde nos pusimos en modo fallero. Nos hicimos las fotos y acudimos a Clero a presentar sus bocetos para 2015. Noe resumió en una foto la alegría de ser amigos. Tanto que nos fuimos a celebrarlo con Lucía y Santi, Alberto y Laura, Amparo y Richard. Cenamos en el Bangarang, que tenía yo tantas ganas y rematamos en Cyrano. Mesa alargada para ir hablando de todo, mientras el sueño me recordaba que hacía muchas horas que no dormía.

Así que cogí un taxi y con mi sensación de sobrepeso me regresé a casa.


De las fotos, eso sí, habrá que esperar al retoque fotográfico, pero a los que llevamos la valencianía a fuego grabada, nos encantó la que subí al facebook. Algo así como mi familia fallera para 2015.


En cualquier caso, el domingo llegó. Con su calor de otoño, con su hora de más que yo no aproveché. Concierto de corales en el Centro Cultural y morro con bravas en el Casino. No comí. Quise dormir, pero Pepa me llamó para ir al tanatorio (había muerto R.Garcerá) y allí acudimos. Volví a casa y ya dije que cena hice. Veo ahora a Carod con Risto y a Martín Berasategui. Los viajes de Chester.

Y así, también, me animo yo a decidirme por otros viajes... El más interesante: el de los atajos al positivismo dormido. Allí vamos. Voy. Decidido. (Creo).

viernes, 24 de octubre de 2014

HORIZONTES


A veces intento que mi cabeza alcance lo que mi corazón pulsa, lo que mi alma teclea sin saber si se puede llegar a añorar lo que nunca se ha tenido. Si se puede echar de menos lo que nunca se ha vivido... Si se puede recordar lo que nunca ha sido. Y así sigo yo, en mis silencios, mirando el horizonte en soledad y pensando si tengo derecho a tantas cosas...

miércoles, 22 de octubre de 2014

MIS NÚMEROS DE LA SUERTE

Anoche cerré el martes con una reunión en Alcásser y una obra de teatro en Torrent. Acudimos los de la falla a ver la versión de Outdoor training y nos fuimos al casal. Yo cerré rondando las dos de la mañana con Borja y Lorena, viendo su álbum de fotos y hablando de amores y muertes. Luego whatsappeé algo con Toni B. que me hizo, en la distancia, mirar el horóscopo. En positivo. Como debo navegar. Tengo que buscar el hueco que no le dedico a Carol para que repase mi espalda, empiezo a acartonarme por el costado derecho sabiendo que debe de ser la tensión. Esta mañana me levanté, me fui a almorzar a la Despensa con un viejo conocido y volví al Ayuntamiento. Tenía tal dolor de cabeza que ni he comido: me acosté. Pepa me despertó por teléfono a los veinte minutos con una cosa del trabajo y ya no volví a pegar ojo. Recogí a Edurne, la llevé a natación, estudiamos algo de conocimiento del medio (cada día desconozco más, las cosas como son) y me encontré con mi hermana cuando les enviaba a los papás (en Ibiza) una foto de la niña que está rechula.

Al decir rechula me acuerdo de mi amiga Aída. Ahora en la tele: preparando la función de hoy, con ganas de ver cómo nos sale y de cenar algo después. Mientras tecleo recuerdo la agenda de vértigo que se prepara mañana y sin darme cuenta casi de que es jueves. Voy a dejar en manos de mi fortuna el mañana ahora mismo, a ver online qué me depara la suerte:

Después del amor, lo más dulce es el odio.  Tus números de la suerte: 8,15,17,44,3,39

Tendría su lógica. Debo echar mañana La Primitiva. (Apunto en la moleskine mental). Apunto también un título de novela que se me ocurrió anoche antes de ir a dormir: Mientras te amaba. Algún día le dedicaré tiempo a ello... Creo que todo el mundo está convencido.

Vamos con el horóscopo:

No te dejes abatir por las preocupaciones económicas. Dale a cada tema el lugar que realmente tienen y no te dejes abrumar por cuestiones materiales. Estar en buena sintonía te ayudará a resolver problemas.

¡Para flipar! Definitivamente... A veces me sorprendo hasta yo.

Voy a dejaros que levantamos el telón en breve.

Pd: Enhorabuena a Luis y Gueguel que acaban de ser papás. Esa es una gran noticia. Ya tenemos en el calendario una excusa para celebrar los veintidós de octubre.

lunes, 20 de octubre de 2014

MONJE SHAOLIN EN FATEHPUR SIKRI

Hay días torcidos para cualquiera. Yo cuando los tengo abro galletas de la fortuna o echo juegos para saber qué tipo de guerrero fuí en otra vida. Todo porque la vida me pasa más feliz cuando toda preocupación es saber que fui un monje shaolin. Y sobre todo, porque leo que a simple vista parece que "mi lado espiritual está mucho más desarrollado que el de guerrero". Y luego que "mucha gente piensa, que por se tan tranquilo y reservado, eres siempre una presa fácil...¡pero no se imaginan que también tienes tu lado sorpresa!". Y me sorprendo a mí mismo. Me alivia un poco. Para gritar enseguida qué tiene huevos que un jueguecito de azar entienda mejor mi manera de ser que tanta gente que tengo alrededor y no se entera...

BIORRITMOS DE LUNES


Lunes. Con biorritmo de lunes. O peor, de domingo noche. No salgo de la guarida y me llega el mediodia con algún whatsapp, la tele encendida y la necesidad de limpiar la osera. Pero es lunes. Lunes con biorritmo de lunes. O peor, de domingo tarde, llegando a la noche.

Tengo que testearme como a principio de año. No hablo de propósitos que nunca cumplimos. Si acaso de la dieta al running y poco más. No hago. Y me siento culpable cuando llega la noche. Ayer, cuando oí a Rocío con Claudio decirme que devora los libros recordé aquél niño que de pequeño los repasaba o al adolescente que cumplió las colecciones enteras de los grandes autores de la Historia de la Humanidad. Me dio un mal de no haber leído a Balzac, no recordar la Odisea, no haber leído más que un libro de Márquez y me alargué en el sueño destructor recogiendo el libro que Amparo y Aure me regalaron por mi cumple... Khaled Hosseini (me retuerce reconocer que lo busqué en google) con "Y las montañas hablaron".

Google es como la calculadora en el instituto. Te ayuda a olvidar, a no dejarte memorizar, recordar,... porque te da una comodidad única. En el instituto yo huía de la calculadora, por eso ahora sigo siendo capaz de resolver 168 entre cuatro a la velocidad del rayo... Pero google nos deja sentados delante de una silla y yo creo que esta silla es la principal culpable de mis biorritmos bajos. No paro. Nada. De nada. Pero demasiado tiempo frente a miles de letras que van pasando por la pantalla, escribiendo unas cosas y otras...

Por eso, a veces, el electrocardiograma de mi alma se dispara con Indias y Parises, Londres y Singapures... Otras bajo y rebajo: me quedo en la silla. Y me freno.

Estoy de lunes, con biorritmos de domingo triste que se acaba. Y tengo que pensar cómo seguir disparando la semana... De momento, acabo el vaso de leche. Miro a la tele. Me doy cuenta de que no escucho los latidos del corazón... Y sigo con el lunes (lunes con biorritmo de lunes absurdo).

domingo, 19 de octubre de 2014

FALLERÍO SUBIDO


Acabo este fin de semana viendo a Celia Villalobos en Chester, acusando un sobrepeso repasado con croquetas de jamón y galletas príncipe y una sensación de que mañana lunes debería ser en realidad, no 20 y sí el primer día del resto de mi vida. Estoy cansado: no diré agotado porque sé lo que es el agotamiento. Pero a ciencia cierta que se me han disparado los cansancios en los últimos días porque no he parado nada. Casi nada.

Es domingo. O lo que es lo mismo cerramos el fin de semana. El viernes lo hice con Junta en la Falla, viendo a los de Dr. Oloriz representar "Dos en la cornisa" y acudiendo a la semana cultural del 48. En orden inverso. Porque en el real, el final de viernes, fue Cyrano con Claudio, Sergio, Laura, Manolo,... El sábado madrugué para ir a limpiar la sede, acudí a los bolillos de Antonio Molle, tomé algo en el Galicia y me fui a dormir. Me desperté justo para recuperar el traje de valenciano, vestirme y esperar a que Richard y Amparo me recogieran. Empezamos con las presentaciones falleras en el Rosiña, con la falla San Valero. Nos cambiamos en casa de Rosa y cenamos con Kike en El Camerino. Nos fuimos a San Valero y cerramos en Cyrano. Regresé a casa con Juanjo, como el viernes.

Acabo de leer en twitter que ha muerto uno de los siete rinocerontes blancos del norte que quedan en el mundo. Leo esta tarde que Teresa, la infectada de ébola, da negativo. Parece que se salva. Afortunadamente. Celia Villalobos dice que no se puede ser incorrecto políticamente: van a por ti. Me suena tanto que sonrío.

Hoy hemos celebrado los Enganxats de Russafa, estamos de fallerío subido. Luego con Mónica y Angelita me pongo a ensayar en la falla. Y regreso sin batería a casa en el 3. Volver a la dieta subyace en el cierre del fin de semana. También de la dieta económica. Mañana es lunes, con ganas de lunes. Tengo que decidir... pero no sé el qué. A veces me siento inquieto. Y es por desconocimiento.

viernes, 17 de octubre de 2014

SIEMPRE POR EL BUEN ROLLO


La gente o te quiere por lo que eres o te odia lamentablemente por la misma razón... Hay que acostumbrarse y seguir adelante. Y cuanto mejor acompañado en el camino, mucho mejor. Yo, afortunadamente, siempre he dicho que tengo más de los primeros que de los segundos, de los que quiero y me quieren que de los que me odian... Aunque también es verdad que a los segundos yo no les hago ni puñetero caso... ¿Para qué perder el tiempo? Hay personas que descubren demasiado tarde que sólo tenemos una vida,... Seríamos demasiado tontos si dejáramos que ellos ocuparan parte de la nuestra... ¡A vivir!

Sonreír mola. Siempre por el buen rollo.

Pd.: Esto lo escribí sin que me pasara nada con nadie... Feliz viernes.

EL TIEMPO VUELA (AFORTUNADO ÉL)

Van pasando cosas. Y las voy viviendo. En el mejor de los casos el tiempo se detiene y mi vida se lanza con su vértigo sobre la agenda de las horas siguientes. En el peor, acaban colapsándose los segundos, hiriéndose los unos a los otros mientras por fin siento algo de brisa primaveral por la espalda - sí, el 17 de octubre -, me quiero dejar de escribir para ir a la siesta, pienso que he usado demasiados gerundios y se agolpan las cosas por hacer... Así, a veces el tiempo lo destroza todo, a otras lo amansa de una manera, casi sangrante.

Hace calor. No es nada nuevo. Tengo una agenda repleta por delante, tampoco lo es. Nuevo, me refiero. Anoche alargamos la directiva de la falla en el Cyrano, mano a mano, Adri, Manolín y yo. Cierto es que cuando son tres personas no sé si se podrá decir aquello de mano a mano, pero lo cierto es que estábamos los tres. Hablamos de todo. Y me fui a dormir rematado por el cansancio.

Los días cunden lo que toca: unos todo, otros nada. Y así voy rebentando las hojas del calendario. Ahora, sin ir más lejos, veo lo cerca que estamos de nochevieja. Y me apura más ver lo lejos que está Singapur que lo cerca que nos cae enero. El tiempo,vuela. No es mía la frase, lo reconozco.

martes, 14 de octubre de 2014

CATORCES DE OCTUBRE

Desde que conocí a Aída, éste era su día. El de su cumpleaños, tan perdidos y dejados como estamos el uno del otro. La distancia que no es el olvido, pero es laxa pausa en la vida. Desde hace menos años, el 14 de octubre lo tengo grabado a fuego, lamentablemente, también en las resacas de alma. He mirado atrás, he ido a cinco años antes para ver mis letras entre una canción de Amaral y un sentimiento de querer esconderme bajo las sábanas la vida entera. Y me he sorprendido a mí mismo sin saber cómo se cocinaban aquellas horas en las que los sentimientos iban rasgando mi espalda. Mi corazón, sin duda alguna, que aún late. Y seguirá latiendo.

Miré también al 14 de octubre de 2010 y encontré un juego que me preguntaba dónde me vería dentro de cinco años. Bien, han pasado cuatro. Y queda menos... Lo mejor es que no sabemos para qué. A ver de aquí a un año si recuerdo estas letras y soy capaz de explicaros algo... Y que sea bueno. Es menester.

El 14 de octubre no escribí: no podía. Estaba como Raúl esposado en un escenario representando con Angelita "La solución". Recuerdo el teatro Flumen, la cena previa a la representación y el momento en que se abría el escenario. Y recuerdo que pensé en que si actuaba pensando en alguna persona, me saldría bien. Y se fueron los nervios y llegó el sudor. Pero salió requetebién.

Y así, reviso y me doy cuenta de que hay de todo, que pasa de todo, que sigue pasando... Y lo bueno, es que hay algunas cosas que olvido. Pero es mejor algunas tenerlas muy presentes.

El 14 de octubre de 2009 no lo olvidaré jamás. Ni cuando conecté el directo de la tele. Aquél mensaje, aquella dedicatoria. Salió de la tristeza. Si duele recordarlo es por no olvidarte. Y esa es la parte bella de todo... que sigues ahí. Como cada 14 de los catorces de octubre.

SIN AGENDAS


Hace una semana, en estos momentos, estaba con una tranquilidad inusitada esperando que tocara levantar el telón. Creo que fue a las once. Subí con calma, quizá me puse nervioso al ver el hormiguero dentro del escenario y salí de aquel ataud con una tranquilidad absoluta. Me lo pasé genial, sintiendo ese gusanillo que nadie sabe llamar de otra manera y que nos retuerce cuando se sale a un escenario.

No se puede vivir del pasado: así que habrá que ir mirando a pasado mañana y ver los proyectos que nos llegan por delante. Que algunos nos tendrán que llegar... El fin de semana cayó entre puentes. No paré. Creo que entre ocios y almuerzos se me fueron los días. Los acabé ayer, con Cris, cenando en "La Mary" y pasando luego por el ABC Park a ver "La isla mínima". Me gustó. Me gustó más verla que finalizarla. Y nos volvimos a casa con los primeros pasos de fresco en otoño que anunciaron hoy una mañana nublada.  Había llegado después de una reunión en la sede de la calle Quart. Un paseo por las Torres y conocer la iglesia de San Nicolás. La plaza de la Virgen me pareció más bonita que nunca. Y la Virgen me cargó de protección para unas cuantas semanas más. Lo sé.

El domingo estuve ensayando en la falla: hemos empezado ya con Angelita y Moni y su "Cal desfer la casa" que en breve estaremos poniendo sobre el escenario. Cenamos en la falla y aún se nos hizo de madrugada cuando Adri y Alba me trajeron a casa. Había echado el día en plan hogareño a excepción de unas bravas y un plato de morro en el Galicia con Amparo, Tiby, Lola, Vicente y Laury. La noche anterior estuvieron también en la fiesta de la Pilarica que bajo la lluvia débil organizamos en Noscarmientas. Y rematamos en Cyrano, donde acudieron Fernando y Juan Carlos con la delegación mislatera. También el sábado por la mañana tuve almuerzo, en lo que era el bar de los Hermanos Moreno y que regentan unos chinos, aunque mantienen el nombre.

Y el viernes, noche, recuerdo las primeras gotas llegando al Albero a cenar con Laura y Alberto, la Guti, Amparo y Machu. Pasamos de nuevo por Cyrano, donde estaban Tiby y Laura, y alargamos la noche. Lo suficiente para volver a casa con unos chicles haciendo camino...

No he parado nada. Por eso miro hacia atrás y recuerdo aún aquel cabaret de muertos que ahora me parece tan lejano. La idea de adelgazar está más atrás, junto con el gimnasio o volver a correr. Algo más cerca mi voluntad de no dejaros sin escribir unas cuantas líneas en cuanto pueda...

jueves, 9 de octubre de 2014

DÍAS DE VIDA [Y MUERTE]


El martes levantamos de nuevo el telón, con una extraña sensación de tranquilidad durante el día que fue cerrándose tal y como llegaba la noche. Bloody Mary Show era una cosa distinta, distinta a la que tantas veces habíamos pensado. Un trabajo teatral más de Noscarmientas que nos valió para jugar y para cambiar de roles. Bloody Mary, mi cabaretero Miguelbrassiano, histriónico y jokeriano, me sorprendió al acabar el espectáculo por varios comentarios de amigos y especialmente de mi madre que me dijo aquello de "creo que te has equivocado de profesión" y que era algo más que un "hijo, quiero que seas artista" recordando a Concha Velasco.

Alargamos la celebración y los comentarios hasta algo más de las seis y media de la mañana: Adrián, Chillarón, Manolín y servidor, cerramos una noche que comenzamos entre todos los falleros que habíamos pasado por el escenario y aquellos que, como familia fallera, no quisieron perder ni los previos ni los post. Fue genial. Otra gran experiencia en la vida (y en la muerte).

Ayer tuve ayuntamiento y programa de tele: especial de Cortes de Honor. Comí con mis Cuesta en La Mary y nos pusimos al día. Pasé por Aguas de Marzo y recogí unas telas que empezaban a guardar polvo. Y después de la tele, Fosters en Gran Vía, con el castillo del Nou d'Octubre de fondo. Acudieron Alberto y su amigo Paco, y se unieron a Mabel, Laura, Julián y servidor.



De allí me vine a casa. Esta mañana tenía la procesión cívica del Nou d'Octubre. Comí con Tiby y sus amigos de la falla. Y me vine a casa porque quería una siesta que no llegó. ¡Qué alguien me explique porque hoy, a las 21:13, los termómetros marcan 30.8 grados! Esto ni es otoño... ¡Ni es nada!

domingo, 5 de octubre de 2014

LA VELETA DE LAS FORTUNAS DE LA VIDA


Anoche recibí el Berni cerrando siete días de órdago. Desde la Fonteta a ayer una semana llena de momentos vibrantes, enhorabuenas, felicitaciones, alegrías... Ayer Ana Ariza en la discomóvil del Nou d'Octubre me pidió que me vista de rojo, porque me dijo que con tantas cosas bonitas, me crecen las emociones, pero calculaba que también los enemigos que sufran por ello. Y es lamentable, pero cierto. Cerramos Cyrano con Noelia, Javi, Alberto, Laura y la tropa noscarmentera después de la plaza del Mercat hablando de ello. Es inevitable. Desde luego. Afortunadamente la legión de amigos vence cualquier desequilibrio, pero es inevitable pensar que va todo tan tan tan tan bien que asusta si se gira la veleta de fortunas de la vida.

Anoche, digo, recibí el Berni por "Tot és Festa": una satisfacción compartida, celebrada y dedicada a mis padres y a mi hermana (olvidé nombrar a Edurne, pero va con Rosa) y a los amigos. Además de recordar cómo habíamos llegado hasta aquí y el equipazo que lo hace posible. En términos generales una alegría de noche compartida con amigos, donde pudimos ponernos al día y echarnos unas risas. El resto del fin de semana, Mislata a saco. A full, que se dice ahora. La verdad, sin parar nada. De nada. Y esa alegría del premio y las felicitaciones que han llegado con ellas. Las bonitas palabras sobre mi profesionalidad o que te acabas ganando lo que siembras. Y un mensaje de Aurora, como ángel de la guarda, esta mañana para decirme que todo parece que vaya genial y le digo que asusta pensar cuando el viento gire la veleta de las fortunas. Porque ando viviendo una época agridulce con menos agrios que azúcares, en la que no paro nada, pero todo es para celebrar.

La siguiente cita el martes en La Rambleta. Ahora que he acabado la procesión me voy a ensayar. A cenar, a alargar un domingo donde hice una siesta de casi tres horas que no me supo a nada. El cansancio no me vence, pero me acompaña. Y desde ayer, con una brillante B gigante en casa, que aún no he decidido dónde colocar...

Me llegó un mensaje de Gema esta tarde: me dijo que me quiere y yo a ella. Y me contó que se ha encontrado de bruces con su pasado, y eso huele a quedada futura, que falta nos hace. Qué bien me vino leerla. Tan cerca siempre (aunque no esté al lado.).

Mientras el viento sigue moviendo la veleta de mi futuro...

jueves, 2 de octubre de 2014

UNA MELANCOLÍA AGARRADA A LA VIDA


Me imagino parado frente a un camino sin fin. La verdad, no sé si es el sosiego que nos trae la edad o la abstemia otoñal, pero reconozco que ando casi por inercia, aunque no pare de hacer cosas, y sin tener tiempo ni para soñar. Si me paro al silencio de la mañana, me imagino al principio de un camino extenso, oculto bajo el sombraje nulo y una maraña espesa de algún bosque lejano. El frío me corta contra la cara y tapo con una cazadora vaquera un pecho que respira aire frío debajo de un cielo que amenaza lluvia. Nada me apetecería más que tener a mi lado alguna voz amiga, y pasear en silencio. Si acaso que hablaran los ojos. Si quisieran decir algo. Imagino como doy un paso y otro al rato, y el frío se hace más intenso mientras clavo las manos en mis bolsillos. Y la mente vuela pensando en cosas que le quedan lejanas a aquel camino lejano por el que paseamos. Disfruto de ver el mar de hojas que el viento no mueve porque el agua apelmaza. Y el camino de piedras, redondeado por charcos sobre los que siguen cayendo pequeñas gotas. Podría tapar mi boca y mi nariz con una bufanda que huela a mi perfume favorito. Y notar como el vaho se pierde a través de la lana y se dispara hacia el cielo. Me gustaría encontrar la palabra perfecta para empezar una conversación que aún no he decidido. Me encantaría que a ti te apetecieran el paseo y el silencio, y el caminar sin freno hasta aquel punto del infinito donde se adivina más camino.

Reconozco que no estoy perdido, que no ando triste, pero tengo cierta nostalgia y una melancolía agarrada a la vida. Y con ella me mezo, soñando con aquel camino que no encuentro. Hoy cerraría los ojos, y luego la puerta, sin casi equipaje y me iría a andar por los rincones perdidos donde la palabra puede aparecer de vez en cuando, pero no es necesaria. Porque quizá, tengo tanto ruido, que quiero algo de silencio que compartir... Me imagino parado frente a un camino sin fin y que comienzo a andar. Y que no voy solo, ni triste, ni nada parecido. Sólo voy.

Me imagino al rato sentado sobre la piedra húmeda o apoyado sobre la baranda de madera, que aún gotea lluvia recien caída, viendo el río caer embravecido, entre olas de espuma blanca. Las ramas vuelan a velocidad vertiginosa flotando sobre las aguas que no cesan y vamos, en silencio, lanzando piedras que se pierden río abajo. Miraría al cielo, que se vuelca con nubes grises. Sentiría el frío envolver mi espalda. Sacaría una libreta en la que volver a escribir. Y de vez en cuando, miraría al lado para saber que no me falta la persona amiga que calla junto a mí...

Reconozco que no estoy perdido, que no ando triste, pero tengo cierta nostalgia y una melancolía agarrada a la vida...

miércoles, 1 de octubre de 2014

TOSES, CANSANCIOS Y SOSIEGOS


Al dibujar sobre la hoja perdida el rastro del camino amarillo, manchado casi de otoños, encuentro una belleza absoluta y nostálgica entre la hojarasca. Y sin embargo, vine a buscar la estampa, porque intento dibujar la pereza animosa de este miércoles nublado. Me desperté con poco ánimo y sueño, después de seis horas dormidas. Decidí emprender el día antes de la hora y me puse las pilas porque sabía que hoy no tenía músicas celestiales sobre las que moverme. He llegado al ecuador de la semana con una mandra total y sin ganas de hacer, que es lo peor. Y así hoy, tengo por delante un final de fiesta de aúpa. Habrá quien crea que me he perdido las horas en relax absoluto y es lo contrario. El lunes de reunión en el partido estrenando sede. El martes, entrevistando a las cortes, ensayando en la Pobla y votando en la asamblea. Hoy, con el despacho por la mañana y ahora una mesa redonda de pirotecnia, programa de la tele y lo que nos echen. La báscula me regaló unos 87,100 que supieron a desconcierto. Y cambié las ansiedades por unas cortadas de carne de pavo, cebolletas y tomates cherry.

No tengo ánimo de mucho hoy. No leí el horóscopo para saber qué me deparaban los astros, pero me encuentro turbio y arrastrado por ese virus que me picó el fin de semana. Toso de madrugada y me despierto con el zen cambiado. Y empiezo el día arrastrado por la tos y la guadaña de la gripe que no sé si acertará. De ahí mi flojedad, griposo anuncio de otoño que viene a días rápido y a otros se pierde entre cansancios y sosiegos.

Yo seguiré como siempre hacia adelante. Me prometí a la sombra de los soles ibicencos que emprendería el vuelo con toda la energía del mundo, y aunque me asusta la velocidad con que desaparece el año de mi vida - aún me recuerdo en Bali hace muy poco - lo cierto es que tengo que dejar de toses y emprender el vuelo. Aunque hay días que me sorprendo a mí mismo con las cosas que me rondan antes de echar a volar... Las cosas, si están escritas, irán pasando. Aunque yo no lea el horóscopo...

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14.

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14. "Bendita locura" En la limpieza de fotos, anoche, volvió a aparecer el bueno de Paulin...