domingo, 2 de septiembre de 2012

DOSES DE SEPTIEMBRE


Doses de septiembre, sombras de domingo. La mañana se despierta como prolongación del ayer, sin perspectiva ninguna, después de echarnos la semana en las fiestas populares de Mislata. Me echan de todo, piropos y cainadas, horas de sueño y descansos entre las brisas que afloran menos calientes en este principio de otro capítulo.

Me han hecho falta hoy un cine (como me reí viendo Ted), un paseo, una compra de rebajas, otro paseo, la plaza Redonda y un japonés para volver a casa vomitado de todo y preparando el mañana que además de tres de septiembre tendrá que ser inicio de mi curso escolar. El miércoles vuelvo a la tele, estamos ya de lleno en el regreso al otoño, el teatro y las presentaciones, Roma y el pasado mañana, que se me aparenta inelegible y de una manera mesiánica escrito para dejarnos de misticimos y voluntades. Me falta ilusión, pero me sobran razones y corazón.

Ángeles vuelve una vez más a ser la libreta muda en blanco sobre la que se escriben los renglones torcidos de mi hoy (un hoy cargado de ayeres y que hace olor a mañana). Ahora escribo, mientras la tele documenta la muerte de Lorca y me encuentro descargado y preparado para al despertar empezar a recorrer lo que venga...

Esta tarde, antes de irme al cine, vi "La vida es bella": Arezzo me recordó a Hugo, quien me mensajeó casualmente al rato. Me volvieron los caminos de la Toscana y el recuerdo del ayer. Y un nuevo pensamiento: el del 2 de septiembre.

No hay comentarios:

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14.

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14. "Bendita locura" En la limpieza de fotos, anoche, volvió a aparecer el bueno de Paulin...