miércoles, 24 de noviembre de 2010

ALLÍ


Que las verdades no tengan complejos,
que las mentiras parezcan mentira,
que no te den la razón los espejos,
que te aproveche mirar lo que miras.

Que no se ocupe de ti el desamparo,
que cada cena sea tu última cena,
que ser valiente no salga tan caro,
que ser cobarde no valga la pena.
 
Sabina, qué placer. Le escucho ahora mientras limpio algo la casa y hago un aparte para escribir mi hoja perdida, del día encontrado. Me despierto, constipado, a las siete y poco de la mañana. Me quedo en la cama a recuperar una gripe que vengo cargando desde hace días. Anoche tuve una cena interesante con Ernesto, Mabel, Angelita y Leo. Una conversación más interesante aún. Y una vuelta a casa. Una vuelta a la noche. Llegué que me costaba respirar. Hace días que debería de haber parado el reloj para reiniciarme. Un chequeo, debo de apuntarlo en las necesidades. Se acaba el disco de Sabina, yo en nada me iré para la tele. Acabo de mensajearme con Pepito, me acordaba de él esta mañana y se acordó de mi esta tarde. Me acuerdo de Bárbara y le mensajeó. Echo en falta un poema, ahora que escucho a Sabina: he vuelto a poner el disco desde el principio...

Hoy he escuchado a Sinatra, que es como oír a Dios pero en inglés. A Luz Casal, que da luz a mi vida. Y retruco con el de Úbeda... Esta pilas de un timbre que se secó, este helado de fresa de la venganza... He recogido una foto de Ibiza, de septiembre, y la he adaptado a mis necesidades de hoy. El periódico anuncia que esta noche llegamos a lo más alto con el "Tot és Festa", coronamos el Miguelete,... He rimado algunos versos. He soñado que se me olvidaba el papel en el teatro. He hablado con Toñi de sus médicos y de mis hamburguesas. He hablado poco con mi hermana, para quedar mañana. Espero estar mejor. Tan maltrecho y ajado que estoy cerrado por derribos... 

Ahora, si me paro y miro al frente, veo cansancio, ganas de parar,... Y al rato sigo. Hacia arriba y no sé de dónde saco las fuerzas. Me pregunta Leo: ¿tú siempre estás dándole a la cabeza? Sí. Pregúntale a la gente de tu alrededor, me pregunta... Preguntaré ahora que estoy solo, así no me llevaré sorpresas...

Me sorprendo a mi mismo apagando la tele.

Voy a seguir con Sabina y limpiando mi hogar... Voy a seguir cogiendo fuerzas. Voy a seguir con ganas de ir hacia allí... ¿Dónde? Allí.

No hay comentarios:

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14.

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14. "Bendita locura" En la limpieza de fotos, anoche, volvió a aparecer el bueno de Paulin...