¿Sabes aquello de desear tanto una cosa que cuando la consigues te parece increíble? Jamás soñé que mi viaje a Egipto tendría tanto como me encontré: mis amigos, amigos nuevos para siempre, experiencias, noches en vela bajo las estrellas a orillas del Nilo, horas de recuerdos, momentos, abrazos, lágrimas, descansos, confidencias, miradas...
Por eso recuerdo tanto el viaje a Egipto, por deseado y recordado, por haberme regalado tanto.
Voy a ser excesivo: creo que nadie ha vivido Egipto con tantas bondades como yo. Tantas bondades difíciles de narrar, porque los sentimientos no siempre son fáciles de contar... Le debo tanto a Egipto y a la gente que encontré allí, que se me hace difícil explicar nada. Aunque lo iré intentando...
3 comentarios:
Maravilloso, nos has emosionado, has hecho un gran trabajo, un millón de besos de tus amigos los chachos...
Jorge y Natalia...
Jaumet... esto esta cargado de sensiblidad ...me encanta encontrar gente como tu , ya q aparte de ser la chispa q nos falta a todos, haces sacar lo mejor de cada uno, vpy a chafardear un poco mas tu blog..
un abrazo enorme desde Barcelona
Jordi (el del instrumento egipcio q no suena ni patrás) jeje
Tenemos la gran suerte de haber vivido todo esto junto a los mejores. Muchas gracias por este viaje,al final como dijo Mohamed si conseguimos ser una gran familia.
Cris y Hugo
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