domingo, 18 de mayo de 2014

DOMINGO DE (INSU)RECCIÓN

Buenas noches. Hay que ir recogiendo. El fin de semana ha sido una cadena de cosas hechas que salieron bien. La primera foto es especial.


Se ve que aparezco en ella con el presidente Fabra. No es, ni de lejos, una imagen típica en mi vida: mítin electoral en Mislata. No puedo explicar las sensaciones.  No quiero, mejor dicho. Me desnudo a menudo en estas hojas perdidas desde hace años. Puedo arañarme el corazón. Pero he pensado que si descubriera algo de mis sensaciones políticas, empezarían a rondar por estas páginas manos con dedos manchados de tinta, como en El nombre de la rosa, y no me parece correcto. No quiero, directamente. Puedo desnudar mi alma, pero no voy a convertir este rincón escondido en una tribuna pública para los del grito y el insulto. No quiero. Lo digo así. No. Que a veces es muy difícil de decir.

Acabamos el acto y recogimos los trastos a la sede, nos fuimos a cenar al Gallego y rematamos tomando alguna copa en el Novelty. Nos fuimos a dormir después de acompañar a Laura a casa, Tiby y yo camino de la madrugada. Nos despertamos en sábado, acudí a comer a casa de Soria, paellas por San Isidro, siesta mínima y fiesta con los andaluces.

Bausà me mandó un whatsapp desde Cyrano, le dije que acudía al acabar de cenar, pero ya no estaban. La foto me encanta. Ese cielo lo descubrí en tonos similares por las calles de Mislata poco antes de que se cayera el día.


Otro whatsapp me despertó una alegría: ha nacido Leo. Hijo de Kone, vía whatsapp me entero que las familias van creciendo con su correspondiente alegría. Les debo aún una visita que nunca hice y muchas más cosas. De momento, me sorprendí en el camino, sabiendo que tenemos otro sobrino más en la vida.


Y llegué a La Mary. Acierto. Lo eligió Kike porque allí trabaja su hermana, me senté entre Edu y Alberto y Laura frente a Eduardo. Cenamos. Demasiado. Y Cyrano. Estaban Alejandro y sus amigos. Y nosotros en nuestra mesa. Pensé que nos iríamos pronto porque el sueño me rondaba. Pero alargamos con unas risas en las butacas echándonos, con Manolín, unas risas a costa de una cucaracha que imaginábamos en el cajón de los CDs... ¿Qué hace una cucaracha allí? ¡Está claro! (Risas).


Me desperté queriendo dormir más. Odiando que mañana fuera lunes. Me fui a la misa de San Isidro, me tomé una coca cola en el casino con Fernando Gandía y Alfonso, entre otros y comí chuletas con patatas asadas en casa. Capítulo de B&B. Sofá. Me perdí la siesta. Pero no hice nada. La noche cae con temperatura de mayo (tan confusa como variante cada día). Y tras este domingo de (insu)rrección llegará otra semana cargada con sus cosas... que iremos contando... claro está (con pausas y prisas).

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