martes, 30 de agosto de 2016

TAN FELIZ



Hace unos días, en mi rincón del mundo, no paraba de escuchar esta canción... Mi pequeña isla me trajo un montón de felicidad (una vez más). Por eso siempre vuelvo a ella, a chafar su arena, a sentir su brisa, a vivir sus noches... Hace quince años que vuelo a refugiarme cada vez que el alma necesita vida. Y siempre, aunque repita cada año, aprendo algo nuevo... Aprendí que hay que aprender cada día. Que a veces hay que silenciarse más. Que me pierdo y me encuentro. Que me siento vivo. Que hay hermanas que valen un cielo entero cuajadito de estrellas. Que hay amigos que entienden perfectamente cada silencio. Que hay amistades que llegarán con el camino. Que hay reencuentros que son como si nunca hubiera existido distancia; porque siempre se tiene la cadena que une sin oxidar... Que hay gente que sin decirlo nos necesita... Aprendí lo que ya sabía: que allí soy feliz. Y veo a la gente feliz conmigo. Y batallo cada día por eso... porque la gente sea algo más feliz. Ya sueño de nuevo con sus paraísos, rincones, su gente y mi vida allí. Cuando soy capaz de mirar a la nada y volar. Tan feliz.

martes, 9 de agosto de 2016

QUE SE ACUERDEN DE UNO


Sé más sereno. Llega segundo. Tú que no compites nunca por ser primero, no te desbordes cuando no toca.

Apunto en el moleskine de mi alma este apunte cuando faltan quince minutos para las seis y sobran 37,3 grados para la tarde. Piano de tango.

Aguanto este verano de manera espectacular: me hice mayor. Miro hacia atrás y los comparo con otros. Silencio hasta en el móvil y calor bailan agarrados en la tarde.

Mi plan por delante: algo del libro sobre Wilde resolviendo crímenes y quizá si la película de Almodóvar, Julieta. Empecé la serie Mar de Plástico, bien después de una Hannibal que me mantuvo tres temporadas atado al sofá en las noches de julio.

De repente Jose Gisbert ayer me manda un mensaje en mitad de la tarde: qué bonito que se acuerden de uno. Cené con Juanjo en Fosters y llegué a casa durmiendo de madrugada. Qué curioso es ver que hoy vacaciones tengo la sensación de estarlo mientras que otros días que no lo eran y estuve en casa la sensación era otra. Anoche, decía, me disperso por el verano, Diego escribió en el grupo sobre el primer años que somos amigo. Lo dicho, qué bonito que se acuerden de uno...

El calor se desploma tejado abajo. Creo que me voy al sol, ahora que ya empezó a escapar. Como yo. Que muto en dragón rojo. Y ni me inmuto.

domingo, 7 de agosto de 2016

DOS TRONCOS EN EL CIELO



Yo vi dos troncos alzarse contra el cielo, empeñando su fuerza en mezclar cada rama, para sentirlas juntos... Yo sentí un sol despedirse tras las montañas, rompiendo en calma un tiempo eterno. Yo respiré una esperanza de años y anhelos, y quise acariciar un viento que se camufló en fría brisa. Me sentí vivo, sin dejarse dormir los recuerdos... Y me sentí extraño, lejano. Soñando sobre nuevos mundos inciertos. Era tarde cuando se caían las nubes, cuando aún quería yo tus palabras y a ti nada te decían mis silencios...

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14.

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14. "Bendita locura" En la limpieza de fotos, anoche, volvió a aparecer el bueno de Paulin...