martes, 30 de septiembre de 2008

ENTRE LAS NUBES



He tenido días de gloria, de sueño, de muerte, de silencio y de sentirme desnudo en este mundo de movimientos constantes... He visto las nubes deshacerse al compás de mis anhelos y pasar volando a ras de cielo buscando un futuro más próspero. He sentido el frío a primera hora de la mañana y cayendo sobre mí, como rocío, en las noches de invierno. He probado las mieles del triunfo, con su agrio sabor. He probado las lágrimas saladas. He probado a probar muchas veces y otras, las que más lamento, ni me atreví. He perdido batallas por cobarde y por silencios, pero muy pocas. Me he batido en duelo contra mí, y me he ganado. A veces, he luchado por ti. Pero muy pocas.
He recordado las veces en que alcé la voz. He pensado y maldicho cuantas callé. Y las veces que caí. Que fueron pocas. Y como remonté el vuelo después...
Te he llorado en silencio, lejanía mía y más mía que yo. Me he aplaudido, en la sonrisa retenida, del triunfo tras la confrontación. Me he sentido vencedor. Y, otras, hundido solo en mis miserias... Tan míseras como las de cualquiera.
He luchado por mantenerme fuera de lo normal, me he batido en defensa de lo mío y de los míos... Me he cansado. He recuperado fuerzas y salud. He mirado al cielo... Y he buscado las nubes esponjosas donde reposan mis sueños. Y he visto, alegre, como se los llevaban las nubes hacia el mañana, justo antes de deshacerse...

lunes, 29 de septiembre de 2008

EL CHICO DE LOS OJOS AZULES



Este verano dijeron en las noticias que Paul Newman, el chico de los ojos azules, había abandonado el hospital con el propósito de morir en su casa, con los suyos. La semana pasada pensé en él... ¿Cómo estaría? ¿Cómo iría su batalla contra la muerte, cuando ya todos sabíamos que ésta le iba a vencer como vence siempre la parca contra cada uno de nosotros?
Reconozco que soy un mitómano selectivo: no un mitómano empujado por el furor del placer que pueda conceder conocer al famoso, sino un mitómano de pocas y destacadas figuras. Paul, el chico de los ojos azules, era una de esas personas que sí tenía en mi haber de mitos, de estrellonas, de relumbrón de hollywood,... Él, Liz, Marlon, James,... Nombres a los que no les hace falta un apellido porque todo el mundo los reconoce, por su trabajo, por la calidad de sus obras, por su calidad humana, porque destilan glamour a raudales y son, tan sólo, estrellas... Paul, el chico de los ojos azules, se nos ha ido este fin de semana y a los que, como yo, hemos disfrutado con cada una de sus películas, nos deja huérfanos de estrellato. (Y cada vez, nos quedan menos...).
Hoy volveré a mirar la foto que cuelga de él en el comedor de mi casa. Hoy, volveré a envidiar su belleza absoluta y a venerar su fama. Hoy le recordaré de nuevo sobre bicicleta, o con muletas, abrazado a la Taylor... Lo imaginaré pegado a la mesa del billar, batiéndose por el color del dinero... Siendo el indomable. El dulce pájaro de juventud... El gato sobre el tejado de zinc caliente,... Que maullaba despacio. Bebiendo desesperado un whisky de la botella apoyado cerca del cadillac... Montándola con Redford al lado. El chico de los ojos azules... Del color del cielo. Hoy estaré celoso por conseguir un amor para toda su vida y recelaré de la valentía con la que el muchacho de los ojos azules dijo: "quiero ir a morir a mi casa".
Siempre nos quedará el cine, sus pelis, sus fotos... Sus fotos de chico rebelde crecido a base de sonrisa y mirada. Siempre nos quedará el consuelo de saber que Paul Newmanexistió más allá de la pantalla grande... Siempre nos quedará el recuerdo de haberlo vivido. Y, ahora, convertido de verdad en estrella, se convertirá en ese mito al que todos idolatramos... Descanse en paz, el gran chico de los ojos azules...


viernes, 26 de septiembre de 2008

DESPUÉS




Después de trasnochar, noche tras noche trasnochada,
después del tintineo de la lluvia, como campanas, en mi cabeza,
después de los truenos, rompiendo al alba la noche,
después de los días de vida y los anuncios de muerte,
después de las suertes habidas,
después de las ganas imperturbables,
después de los silencios, escasos, casi nulos,
después de tantas cosas en qué pensar,
después de dos copas y diez cigarros,
después del sueño batido a muerte con los ojos cerrados,
después de estar donde no quería, sin saber que no quería estar,
después de la humedad calada a golpes,
después de la ventana cerrada que lo asfixia todo,
después del golpe con que el corazón te quiebra,
después de la sonrisa perdida en el pasado tiempo,
después de las no ganas de ganar en nada,
después de las ilusiones rotas,
después de todo y de nada,
sólo quería ver tu mirada...

miércoles, 24 de septiembre de 2008

HE SUBIDO CONTIGO...



Me subí por primera vez a un tejado contigo, superando mi vértigo... Era de noche, regresaba de un viaje familiar y me llamaste para ver Valencia desde el cielo mismo. Te avisé: "Tengo miedo a las alturas...". Pero subimos... Y vi Valencia desde el cielo, sin perder el miedo a las alturas, pero disfrutando de las nubes, de Santa Catalina, de la noche... Hasta perder el miedo...

Subí contigo al Himalaya, con mi miedo a las alturas. Subí contigo al desierto del Nubra, con mi miedo infantil y mi vértigo. Subí a Delhi y bajé a las profundidades de Jaipur, y de Agra...

Sea como fuere, tengo la sensación de que contigo he ido subiendo, escalando, ganando,... En silencios y ausencias, también en las charlas, en las confidencias, en los saludos desde lejos, en las palabras, en las risas y en las sonrisas,... A veces he tenido la sensación de que querías huir, otras de que venías en mi búsqueda. A veces he sentido que me hubieras cortado en dos y, otras, pegado, a conciencia, con celo y cuidado... Supongo que en todo eso se basa la Amistad.





Querido Laza, hoy cumples vida, que digo yo. Hoy pasas por el triturador del calendario para sumar uno (que en tu caso son muchos, cumplidos a golpe de experiencia y vitalidad),... Me gustaría seguir contando y contándolos contigo, con esa fuerza que da la Amistad con mayúsculas, más allá del respeto y de la admiración que te tengo...

Me gustaría seguir subiendo contigo. A la azotea. A la azotea del mundo. Para perder mis miedos y el más pueril de todos: pensar que de a veces, me partirías en dos... Me gustaría seguir niponeando contigo, enviándonos las canciones que nos recuerdan al desierto, recordando tantos momentos y buscando otros nuevos,...

Recuerdo perfectamente cómo apareciste en mi vida, o yo en la tuya: lo siento, el azar existe. Y si después de tantas vueltas por el mundo, hemos acabado encontrándonos, será por algo... Aunque sólo sea por Amistad, con mayúsculas...

Gracias por subirme a la azotea, por embarcarme a la India, por dejarme pasear en tu vida, por tu vida, por tus platos de pasta con mascarpone, por tus canciones, por las fotos que a veces me llegan, por las que a veces no me envías, por esas comidas furtivas de dos horas y media, por no amedrentarte, por ser como eres y aceptarme como yo soy,... Gracias por ser mi "lazarillo" en muchos momentos de mi vida. Feliz día, y que cumplas más. Muchos más. (Y yo que los vea, caminando a tu vera.).

martes, 23 de septiembre de 2008

EN LA TARDE DE SEPTIEMBRE



Bajo amenaza incumplida de gota fría, la tarde cae con la visita de mis padres. Mi madre, mientras papá mira la tele, ojea los recuerdos de Egipto. Y yo, desde la lejanía, de vez en cuando miro ahora el Valle de los Reyes, luego la Mezquita de Alabastro,... Recuerdo aquél sol, aquél calor brutal y cegador, doloroso y poco recomendable. Aquél Egipto que empieza a grabarse, como sobre piedra, en la memoria y en mis recuerdos... Ahora, al ver las fotos, mirando el pasado que siempre quise futuro, me descubro a mí mismo echando en falta a los que viajamos por aquellas aguas del Nilo, entre nubios y cocodrilos. Ahora, mirando atrás, como hago a menudo, siento nostalgia de las calurosas noches cruzando en crucero el mundo. Ahora, mirando atrás, mirando las fotos, me descubro a mí mismo que llegué a vivir el sueño. Sueño cumplido... Mamá se para en el primer párrafo de lo escrito: "Por lo que dices, da la sensación de que Egipto fue el viaje de tu vida...". ¡Cuánto saben las madres!

lunes, 22 de septiembre de 2008

ALEGORIA (SIN ACENTO EN LA I)




Nos puede ir en ello la vida, en la amistad compartida, en las horas partidas y en las que llegarán. Hoy cumples años, uno más, mientras cumples días y noches llenas de fiestas, de experiencias vividas, de sueños compartidos, de momentos esperados, de alegría, dicharachera y sonriente. La niña de los ojos dulces, de la sonrisa eterna, impulsiva y excesiva hasta el impulso y el exceso mismos cumple añitos... Te he llamado esta mañana. Antes de respirar ya he notado que no podías hablar, que estabas (sospecho) en tu trabajo de chica madura y responsable, con tu laboriosidad de hormiguita guerrera y vocación impagables... Hoy te he llamado, para hablar entre silencios por muy pocos segundos, consiguiendo un par de risas y mucho afecto. ¡Cuánto tiempo desde aquél cumpleaños en el que te regalé mi suéter verde, de rayas negras, que me hacía tan beisbolero! ¿Lo recuerdas? Con su botecito de cebollitas en vinagre, que no dejan de ser una pasión compartida... ¡Cómo tantas otras cosas! Qué de recuerdos, de adolescencia, de ganas de vivir, de noches en el Zariche viendo en la lejanía como te robaban el amor que hiciste tuyo... Cuantas horas de caminata (cuantas veces nos dijeron que parecíamos novios, el de La Lina y la Almela...). ¡Ay, la vida! La que vamos cumpliendo...
Hoy es tu cumpleaños y mi excusa para saber que estás ahí, que siempre estás ahí, aunque te perdieras por el cielo cuando se te llevaron los Ángeles... Luego, no sé si por Julio o por agosto, regresaste a mi vida... Aquella noche en la puerta del garaje de mi padre. Aquellas confidencias. Aquellos secretos. Aquellos anhelos... Anhelos de la vida, que nos va pasando...
Y las horas de teléfono, tan parecidas a las inacabables cartas que, de pequeño, recibía desde una tal calle de Tales... Y el invierno soltero de Manolo, con nuestras fiestas nocturnas por Valencia. Y los silencios (del miedo que se te llevaba el corazón a trizas). Y la vuelta a sonreír... Y cuando fui el tonto al que se le cayó la coca-cola en tu cumpleaños,... ¡Y tantas cosas que nos quedan por vivir! Qué hermosas las cosas que nos han pasado. Qué bueno contarnos las que nos perdimos... Qué grande saber, que nos queda mucho por pasar y por contarnos... Con un plato de cebollitas en vinagre sobre la mesa y la amistad en la palma de la mano. Un beso. Felicidades, guapa.

domingo, 21 de septiembre de 2008

4.000... UFFFF!



He mirado el contador: 4.000. ¡Cuatro mil! Cuatro mil entradas registradas en este blog que empezó una noche de diciembre, entre el frío y la ausencia de objetivo alguno... Cuatro mil personas mirando unas letras, a veces unas fotos, algún vídeo o esa canción... Todo para todos, con una libertad que a mí me asusta y que como un día me dijo un saltamontes gusta a muchos porque ha sido libre, arrancado desde lo más adentro de uno mismo y sin cortapisa alguna... Creo que nos hemos conocido más, que os ha valido a algunos para saber más de mí, pero sobre todo, me ha servido para ser más yo y conocerme mejor... Una experiencia que llega a los 4.000 y que como nació sin objetivo ninguno, no sé adónde llegará (¿lo sabe alguien?)...

Mi vida, durante estos cuatro mil, ha tenido absolutamente de todo. Y creo que eso es lo más grande, que gracias a este blog he vivido intensamente con vosotros muchos de los momentos más especiales y bonitos (también los duros y difíciles de mi vida): desde la Paloma de Picasso en la Nochebuena con la que comenzamos a la fiesta anoche de Ana Cuesta. Todo ha sido (y es, será) un viaje fantástico y maravilloso, sentido y compartido. He compartido con vosotros la India (qué decir que no haya dicho ya), Ibiza, Praga, Egipto, Mallorca, Londres,... Mis viajes por fuera. El nacimiento y bautizo de mi ahijado Álvaro (Mi viaje por dentro), la pasión por mi sobrina y mi hermana, mi cariño por mis amigos (mi amor desbordado), Whitman y Alberti, Benedetti del corazón, Neruda y Gloria Fuertes... La pasión por la vida y la angustia de la lluvia (las goteras del alma), el abrazo perdido en el tiempo de los que pasaron por nuestras vidas, las cosas más sencillas y el renacer de uno mismo, la salida de todo lo que tenía que salir, las ganas de volar... ¡Y el vuelo!

Este blog me ha regalado mucho (como vosotros, como los 4.000, en tantos días de buscar, de pararos a leer, de querer saber, de dejaros llevar...). La boda de Mayra y Quique - Gracias siempre -, Miguel y Arancha, Aurelia y Ricardo... Amores que espero os duren siempre porque nacieron con unas fiestas increíbles. Y las cosas sencillas, las más simples, la sesión de fotos con Toñi y Sofi, el viaje de" Argenlita", la llegada de Paula, mis momentos de cine, los de oscuridad perpetua, la noche de San Juan, la premiére de cine, los recuerdos de infancia, la enfermedad de mamá, el verano intenso repleto de vida... Todo. Y todo con 4.000 respiraciones, con una cantidad intensa e inmensa que acompañan a este blog, obligado ya a ser caminando, aunque sea solo... Solo con vosotros.

¿Seguimos caminando juntos? GRACIAS.

EL SUEÑO DE ANA



La pequeña Ana ha alcanzado su sueño (una de sus metas, pero no la meta en la vida, seguro). Anoche vivimos con ella - y despiertos - la espera de tanto tiempo y la victoria conseguida y ganada (merecida) por tantos momentos de dedicación, por tanta ilusión y por ser para ella, sin dudarlo, el sueño, ahora ya cumplido.
Desde anoche, la pequeña Ana, mi Anita, la chica morena y guapa de la 97, forma parte de la Corte de Honor de la Fallera Mayor de Valencia de 2009: objetivo cumplido. Ahora, entran a formar parte de nuestra vida, los celos por saber que la compartimos ya con la fiesta, con el mundo fallero, con tantas y tantas personas que se sorprenderán, cuando conozcan a nuestra pequeña Anita, al comprobar que es, tan sólo, un ser excepcional.
Espero que viva con tanta ilusión este año, como ayer se derramaba por su mirada: nuestra pequeña gran reina vivirá y nos hará vivir, como siempre, sonrisa en ristre y preparada para cargarse la mochila de la vida con mil y una experiencias que nunca dejará de contarnos, de hacernos vivir, de hacernos sentir, de compartir...
Te vamos a seguir de cerca, vamos a vivir contigo tu sueño y te vamos a seguir queriendo como siempre te hemos querido. Todos. Todos los que siempre hemos estado y queremos seguir estando contigo. Desde hoy, todos, los que siempre te hemos querido, soñamos contigo... Qué sueño tan bonito. ¡Que te sea dulce!

jueves, 18 de septiembre de 2008

MI PEQUEÑO TESORO




Había una canción fantástica de Sole (en Presuntos) que se llamaba mi pequeño tesoro, que le dedicaba, creo, a su hija y que era el mejor regalo que le podía hacer, sin duda alguna. Gran parte de la canción a menudo me recuerda a Edurne, la pequeña mocosa, rebelde y testaruda, que desde hace casi tres años nos robó el corazón en casa.
Con ella tengo muchos de mis mejores recuerdos, de lo más sencillos - sin dudarlo - pero de los más emotivos. Recuerdo los nervios navideños de la espera cuando nació, la preocupación de los primeros días, los primeros pasos, cuando abrió los ojitos (¡cómo bostezaba siendo bebé!)... Luego cuando me reconocía en las fotos, o en la tele... la atención con la que siempre ha seguido a los mayores cuando hablamos (aunque yo no sea muy mayor) y el día que, con su recién estrenado traje de valenciana, que Ernesto le cosió con una tela que Papá Noel le había traído en mi casa por Navidad, dijo su primera palabra y fue mi nombre: "Maime". (Era la plaza de San Agustín, de noche, a punto de desfilar)... Aprendió a andar, a correr, a jugar a los toros... A despertarme a horas tan intempestivas que te ponías de los nervios, pero al rato, su te quiero muchísimo, sus besos, su fuerza apretando los bracitos para darte cariño, o su respiración entrecortada cuando hacíamos la siesta y ella estaba constipada hacían y hacen que te olvides de todo y de todos... Y eso, es muy grande. Quizá, por todo eso, Edurne, es mi pequeño gran tesoro...


martes, 16 de septiembre de 2008

AIDÁ, AIDÁ... AIDÁMONOS A JUDEA...




Me va a matar y lo sé. Me va a matar por la foto (que hay que ser cabrito para robarte esta foto y clavarla aquí en la red). Pero si me mata, va a ser con cariño, porque también sé que me lo tiene... Nuestra amistad es de adolescencia, como los amores, de verano, de vernos menos de lo que nos gustaría pero tenernos siempre tan presentes... Aída es mi amiga la de Madriz (la asquerosa de ella no ha pronunciado una "d" final ni aunque la maten). Es gata por los cuatro costaos, chula, madrileña (con acento del centro mismo de Madriz)... ¡Y a mí me gusta tanto! Es la hermana de Paca (La de España), y de Nuri, y de Bebes,... Que son un poco parte de mi familia (y yo me siento de la suya). Nos pasamos la adolescencia con el AJD y el JAD, que no son ninguna droga, y que no sé si ella recordará...
Ahora la tenemos en Brasil, por un tiempo, un largo tiempo, pero aún recuerdo (divertidos) la noche que la vi por última vez en Madriz, cuando fuimos a ver Jesucristo Superstar y la liamos, casi sin querer, a cubatas en la noche... Hemos pasado muy buenos momentos y espero que sigamos pasándolos porque Aída, con su genio, con su fuerza y con un carácter tan fuerte, es una parte tan importante como imprescindible de mi vida... Un genio amansado por el brillo de esos ojos que ya tenía adultos en esta foto que una noche robé de la habitación donde fue creciendo y desde la que me enviaba las cartas... Algún día he de recordar el maletín de las cartas que anda escondido por casa de mis padres (olvidado) y a golpe de letra redescubrir aquellos veranos con las chicas de Madriz, las de la carretera... Qué distinto habría sido todo de no estar Aída en mi vida...! Qué distintas las idas a la vaca a primera hora de la mañana, repasando los contadores de casa con la primera luz del día... Qué distinta la manera de llegar a casa, gritando "abuelaaaa" recién salidos del trinquete... Qué distinto mi conocimiento de las vacas! Y de los cerdos... Qué distintos tantos momentos juntos que esperan un regreso de Brasil para seguir viviendo... Y siempre con Aída, con su genio, con su carácter... Con su acento del centro de Madriz mismo, qué tanto me gusta... Un beso, hasta allí de largo... Devuélvemelo pronto (y aquí, o tendré que ir a dártelo...).

IBIZA, MON AMOUR...



Recién regreso de Ibiza. Mi isla. Mi isla blanca... Esta foto en el Bora Bora es un buen resumen de algunos de los muchos momentos vividos de fiesta, conociendo gente, bailando y disfrutando del sol... Regreso de ibiza (y seguiré regresando).



jueves, 4 de septiembre de 2008

VOLVER, CON LA FRENTE MARCHITA...



Anoche, de la manera más cinéfila que se me ocurre, te esperamos al regresar. Bajo el burlón mirar de las estrellas que, con indiferencia, hoy te ven volver... Estación de trenes. Abrazos de despedida, de bienvenida... Y una caterva de los tuyos a pie de andén. Muchacha, no sé si lo sabes, pero ayer comenzó tu nueva vida. El después de quien ha vivido una experiencia como la tuya, o como la mía,... Mi vida ha cambiado y soy consciente de ello desde que regresé de la India. Y me siento mejor todavía, aunque te parezca increíble...

Sentir
que es un soplo la vida
que veinte años no es nada,
que febril la mirada
errante en la sombra
te busca y te nombra...

Anoche, me descubrí abrazándote en mitad de la estación, alegre por tu vuelta, escuchando en tu susurro que me había echado de menos. También yo. En mi regreso de la aventura, en el trance con mi madre, en el verano, en las noches de calor y conversación, en el teléfono que dejó de sonar, en la borrachera bajo la lluvia,... Y allí, con los tuyos, ayer, esperando tu regreso. Celebrando tu vuelta a una vida que ya no volverá a ser la de antes. A partir de hoy te toca volar, tan alto como quieras, porque saber sabes volar mucho pero hay que saltar... Y te toca saltar. Y saltarás. Y los que ayer, a pie de andén, esperábamos tu ristra de maletas y tu sonrisa de oreja a oreja, saltaremos contigo...

¡Pero el viajero que huye
tarde o temprano detiene su andar!

Y aunque el olvido, que todo destruye,
haya matado mi vieja ilusión,
guardo escondida una esperanza humilde
que es toda la fortuna de mi corazón...

Bienvenida a casa. Hacía años que te esperábamos...

miércoles, 3 de septiembre de 2008

UN VERANO DIEZ (Mi vida en diez fotos)

[1] ALBENTOSA (Fiestas de agosto): esta foto es el resumen de una noche divertídisima entre cuatro personas que hace mucho tiempo no salían juntas de fiesta. Lo pasamos de maravilla, nos reímos muchísimo, entre las fotos, los ejercicios de Aurelia para su cuello, Aurora en su habitat... Y sobretodo, la sensación no sólo de reencontrarme con Albentosa tantos años después, sino reencontrarme con estas personas que son tan especiales en mi vida...



[2] AMANECER DESPUÉS DEL Q-ART (Llegando a casa antes de que salga el sol): No todo el mundo sabe levantarse con una sonrisa en la cara. Yo suelo hacerlo cada día, ya lo sabéis. Pero lo paradójico es lograr despertarse con una carcajada... Repasar la noche anterior en Q-art, la fiesta de toda la noche, las risas, y acostarse con este sol, que amanece tan radiante, fue un motivo más que suficiente para recordar por siempre la noche... (¡Qué me confunde!).



[3] ENTRE AMIGOS (Y mira que nos costó...): Son dos de las personas más importantes de mi vida, mi hermano kármico y Hugo. Nos costó mucho encontrarnos este año porque José anda muy liado con la seguridad ciudadana y hasta que Hugo y yo no requerimos de sus servicios (nos atacaba la inseguridad en el Trinquete) no vino a nuestro rescate... Ver la foto es una gozada, porque significa que seguimos creciendo juntos, con todo lo nuestro, con todo lo que llevamos, con todo lo que nos hemos ido sumando y seguiremos sumando... Esta foto me gusta mucho. Tanto como ellos. Son mis amigos... (y en los bares pasábamos las horas).



[4] EL RÍO: Cuántos años sin bajar al río... Cuántos años, que casi no recordaba el frío del agua... En mitad de las fiestas, tarde de resaca sin vaquillas, caminito al río... Primero bajo el sol y cuando me decido, salto al agua, pierdo la sandalia, y el resto ya es memoria... Memoria de cuando nos perdíamos allí de jóvenes, de los primeros cigarros a escondidas, de las semana santas con calimocho... Recuerdos que me brotaron, como el agua... fresca del río.



[5] FIESTAS DE AGOSTO (Que el ritmo no pare, no pare, no...): Las noches de fiestas fueron una fortuna, una diversión desbordada, entre camisetas escritas y sesiones de sumo... ¿A qué no se entiende nada? Así fueron mis fiestas... surrealistas! Increíbles, divertidísimas... Si antes hablaba de los amigos de siempre, la suerte fue encontrar otros nuevos... Un fiestón, ya les dije. Ricardo, Richard y Juanma (Isra!!!!) han sido una compañía excelente para las noches de Baco... Brutal.



[6] BATALLA DE FLORES (El camino de A. C.): La Batalla de Flores fue el regreso brutal de la India a España, a mi Valencia colorista y colorida... Hacerlo, además de una forma festiva, fue un cambio de registro importante,... Mamá estaba en el hospital (hoy ya recuperada, gracias a Dios)... Laza volvía a las fotos, y, entre clavellones, me encontré de nuevo con mi vida... Y con alguna alegría.



[7] EDURNE (Mi pequeño tesoro...): Comprobar cómo se va haciendo mayor mi pequeña Edurne es una maravilla... Habla por los codos, sonríe, coquetea,... Nos hace a todos la vida más humana. Crecerá y empezará, humana que es, a enviciarse, a tener malas ideas, a pelear... Pero ahora es un torbellino de verdad, un ciclón de fuerza, una maravilla... Un tesoro. Y tan guapa...



[8] FINAL DE FÚTBOL (Oé, oé, oé, oé...): Antes de que Angelita partiera a Argentina y servidor a la India, la "machucha" organizó una cena, con gambas increíbles (y digo bien, increíbles...) y muchos amigos alrededor... España de final. Nosotros entregadísimos y, al final, como siempre que nos juntamos, fuegos artificiales y fiesta... Mucha fiesta...

[9] NOCHE DE SAN JUAN (Los deseos se los lleva el fuego... y a tiempo de purificarnos siempre estamos...): Nos fuimos Toñi, Sofi y yo. Noche de San Juan en la playa. Y en la playa de Foios además, que tiene para nosotros un historión de la leche... Lo pasamos bien, nos reímos, nos callamos, pensamos, nos divertimos... Viviendo por la noche, que es algo que a servidor le gusta hacer... Aquella noche se veían las estrellas como hacía noches que no se veían en Valencia... Y lo pasamos bien. Muy bien. Sentados sobre la manta, escuchando la música y viendo fuego por todos los sitios... Muy bien, lo dicho.



[10] MISLATA (Fiestas de agosto): También las fiestas de Mislata tuvieron su aquél... Y sobre todo, la sensación de que uno, en verano, se lo pasa genial... ¡Aquí de moro de la morería! Me falta el medieval de Rubielos, las horas de hospital, el helado en Alboraia, la noche de Canet... Muchas cosas. Pero esas las tengo en la memoria... Ha sido un verano diez. Ya lo creo.

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14.

DIARIO DE UNA CATARSIS. Capítulo 14. "Bendita locura" En la limpieza de fotos, anoche, volvió a aparecer el bueno de Paulin...